Depresión invernal

El invierno no destaca precisamente por la presencia del sol, lo cual afecta anímicamente a más de uno. Hemos reunido varios consejos para que puedas mantener tu felicidad en alto, por mucho que fuera haga un tiempo de perros. 

#1 SAL AL AIRE LIBRE

Un paseo al aire libre da color al rostro, porque aporta oxígeno a la piel y estimula la circulación. Pero salir al exterior no solo activa el aparato circulatorio, sino que también ayuda a absorber el máximo de luz posible. La luz solar estimula la producción de vitamina D3, redundando positivamente en el cuerpo y la mente. Por cierto, incluso con cielo nuboso o cubierto, la luz natural del día sigue siendo tres o cuatro veces más potente que la iluminación de espacios interiores. 

En invierno sucede a menudo que recibimos demasiado poca luz solar, por lo que nos podemos quedar fácilmente cortos de vitamina D3. BEYOND omega contiene vitamina D3 liposoluble de extracto de algas, que tiene una función crucial en numerosos procesos del cuerpo humano y aporta vitamina solar durante todo el año. 

#2 DALE COLOR A LA VIDA

El cielo está gris, las ramas desnudas de los árboles se agitan bajo el viento frío, la niebla te empaña la vista… Tu vestuario se ha contagiado de la desolación de la naturaleza y te fundes con tu entorno. No tienes por qué. Digamos “¡basta!” Una bufanda chillona, un gorro colorido o unos guantes desenfadados seguro que te ponen de buen humor; los piropos que te echen de dejarán radiante. 

#3 ESTRUCTURA TU DÍA A DÍA

Cuando fuera está oscuro y frío, hace falta seguir un día a día estructurado y mantener los rituales cotidianos. Porque la falta de luz diurna en invierno puede alterar seriamente el reloj interior. 

#4 ACURRÚCATE Y SÉ FELIZ

Acurrucarse y acariciarse dispara los ánimos. ¿Por qué? El contacto físico activa determinadas hormonas y neurotransmisores que tienen un efecto positivo en el estado físico. Los contactos de más de 20 segundos de duración producen oxitocina, la hormona de la fecilidad, y muchísimas endorfinas. Así que disfruta de la proximidad de tu pareja o tus hijos, porque obra milagros cuando fuera reinan la oscuridad, la humedad y el frío. 

#5 EL DEPORTE NO SOLO PONE EN FORMA, SINO TAMBIÉN DE BUEN HUMOR

Atención, perezosos: esta información quizá os haga cambiar de opinión. El deporte y el ejercicio incrementan el bienestar físico y mental. Precisamente en invierno, el deporte puede contribuir decisivamente a sentirte bien y superar los meses fríos sin depresiones. Para que suban las ganas de practicar deporte es muy importante encontrar una modalidad que te divierta. Prueba diferentes cosas y márcate un plan. Cuanto más variado mejor, porque la variedad también estimula la motivación. 

El SPORT boost con sabor afrutadamente fresco permite un aporte óptimo de líquidos y rellena los depósitos de glucógeno de forma duradera a base de hidratos de carbono de longitud de cadena variada. Ya sea antes, durante o después del deporte, la solución isotónica da al cuerpo lo que necesita para rendir al máximo. 

#6 DATE UN TIEMPO DE CALIDAD

Vive tu vida con conciencia y tómate cada día unos minutos solo para ti. Lee un buen libro, cocina un plato rico o sigue trabajando en un proyecto que tienes guardado en el cajón desde hace meses. Date cada día algo de tiempo de calidad solo para ti, o también momentos junto a tu pareja y tu familia. Olvidaos por unas horas del móvil, portátil, la casa sin arreglar y vuestras preocupaciones. Haced un ponche o galletas, jugad a juegos de tablero o charlad amenamente mientras os tomáis un té. No importa qué hagáis, lo importante es que os dediquéis toda vuestra atención. 

Los ingredientes naturales de las CAPS moodoo mejoran la fortaleza mental y aportan más tranquilidad. Ideal contra la depresión otoñal o invernal así como el síndrome premenstrual para recuperar el equilibrio emocional. 

#7 RÍE TANTO COMO PUEDAS

¿Te suena? Reír ayuda a reducir el estrés y activa el sistema inmunológico. Así que desempolva el libro de chistes, mírate los vídeos divertidos de gatos en YouTube… A la de tres, comienza el cosquilleo.